El Código Electrónico de Producto (EPC, por sus iniciales en inglés) es un sistema diseñado para identificar de manera exclusiva cualquier objeto en el ámbito global. EPC es considerado como la solución estándar de identificación y en poco tiempo se espera que su uso se masifique y se convierta en una herramienta tan utilizada como el actual código de barras.
EPC trabaja sobre la tecnología RFID (Identificación por Radiofrecuencia), este es un término genérico para denotar todas las tecnologías que usan como principio ondas de radio para identificar productos de forma automática. Esta tecnología ha existido por décadas, y en un nivel básico, involucra el uso de etiquetas especiales o TAG´s que emiten señales de radio a unos dispositivos llamados lectores, encargados de recoger estas señales.
El Código Electrónico de Producto (EPC) es un sistema único diseñado para identificar de manera exclusiva cualquier objeto a nivel mundial, número que además, se encuentra almacenado en un TAG de RFID. Se entiende por EPC la estandarización del RFID. Sin embargo, más allá de esto el sistema EPC involucra muchos más aspectos dentro de su estándar, como lo son el software, los sistemas de información, la red por la que viaja la información de cualquier producto, entre otros.
A diferencia del código de barras, las aplicaciones de EPC son ilimitadas y pueden brindar beneficios en todos los eslabones de la cadena de abastecimiento, incluyendo el sector transporte.
El objetivo del sistema EPC es volver la cadena de valor cada vez más eficiente y permitir una total visibilidad de los objetos que se mueven en ella; además aumenta la calidad del flujo información compartida entre los socios de negocios.
Esta solución, que ya está siendo adoptada en países como Estados Unidos e Inglaterra, es promovida en nuestro país por GS1 Colombia, dado que pertenece al grupo de estándares liderados y desarrollados por la organización mundial GS1.
EPC, una nueva herramienta logística
La implementación de EPC representará una revolución para las redes de valor. Su masificación permitirá ejercer mayor control sobre los procesos logísticos propios de cada sector, generando información en línea que permitirá a los socios de negocio tomar decisiones más oportunas.
En la actualidad se pueden encontrar aplicaciones de RFID en diferentes actividades. Un chip de RFID puede identificar al ganador de una competencia deportiva, un usuario de un servicio, un tiquete aéreo o ser utilizado como dispositivo de seguridad. Sin embargo RFID no es lo mismo que EPC (ver recuadro). En la mayoría de los casos estas son aplicaciones totalmente independientes e incapaces de comunicarse entre ellas.
Un ejemplo nos ayudará a comprender mejor la trascendencia del desarrollo de EPC: si en Colombia cada concesión que administra un peaje implementara su propio sistema de RFID para controlar y agilizar el pago de este impuesto, un camión que se desplaza de Bogotá a Barranquilla tendría que adquirir tantos TAG´s como peajes tuviera que pasar.
Si por el contrario, estas concesiones se pusieran de acuerdo y decidieran estandarizar la utilización de EPC, un único TAG serviría para identificar un automóvil a lo largo y ancho del país, ya que este estaría identificado de manera única a nivel global.
Asumiendo Nuevos Retos
El pasado 2 de noviembre, GS1 Colombia con el apoyo de Asecarga, Colfecar y la Cámara Colombiana de la Infraestructura realizó el lanzamiento de la INICIATIVA PARA LA VISIBILIDAD DEL TRANSPORTE MEDIANTE EPC/RFID. Este proyecto busca incentivar a las empresas relacionadas con el sector transporte a dar inicio a la implementación de esta solución para ir evaluando las posibilidades y beneficios de su utilización.
En términos generales esta iniciativa busca la identificación de los vehículos transportadores de carga y pasajeros con un TAG de EPC, de manera que se pueda hacer seguimiento en lugares clave dentro de su recorrido como peajes, puesto de control de transporte, pasos fronterizos, zonas francas, puertos, etc.
Aunque EPC no pretende reemplazar a los sistemas GPS, si permitirá conocer la posición de los vehículos en los momentos en que se acercan a puntos de lectura. Lo que verdaderamente hace única esta solución es la posibilidad de que esta información sea conocida en línea tanto por los dueños del camión, como por las personas que trabajan en puertos, zonas francas, etc. Lo que les permitirá alistarse para recibirlo, agilizar los procesos y tener una mayor gestión del flujo de los vehículos.
En pocas palabras, EPC es una herramienta única para ejercer control y hacer seguimiento sobre los vehículos, brindando información oportuna que permite tomar decisiones acertadas.
La llegada de EPC constituye un reto inmenso para las redes de valor colombianas, que debe ser asumido por los empresarios con responsabilidad y proactividad.
Se espera que en menos de 10 años todos los procesos logísticos utilicen de alguna manera esta solución, y nuestros empresarios no pueden esperar a que el mercado exija su implementación para evaluar la posibilidad de adoptarlo.
La información que suministra el sistema EPC es muy valiosa, no solo por su exactitud, sino por su oportunidad. Depende de los líderes de las empresas colombianas identificar los beneficios aplicados a sus casos particulares y tomar la iniciativa de iniciar su implementación de manera que estén preparados para responder al mercado global en el momento en que este así lo exija.